¡Cryptshow ha vuelto! Tras la edición online del año pasado, en esta ocasión ha tenido lugar una programación presencial y, al mismo tiempo, a través de plataforma digital. Dividida en dos fines de semana, esta edición ha vuelto a llenar el Círcol hasta completar su aforo trayendo de vuelta la variedad de proyecciones que ya llevan quince años entreteniéndonos en pleno verano.
El pistoletazo de salida fue mediante el ya mítico recital de poesía “Poética Coemeterium”. Un cambio de última hora trasladó la magia desde el cementerio a la Iglesia de Santa María. Pese a que esta modificación casi invierte la ambientación del recital, siguió siendo igual de especial el hecho de abrir un pequeño festival con un evento como ese. Además del recital, durante el primer fin de semana también se pudo disfrutar del vermut literario anual con la presencia de Diego López, Marta Torres, Lluís Rueda, Xavi Pons y Josep Luzán. Presentaron, siguiendo el orden de autor-obra, “El Buque Maldito #35”, “Rondalles de Sang”, “Decapitación: Iconos y Leyendas”, “El Almanaque del Vídeo” y “¿Quién vive?”.
Al mismo tiempo, a través del canal de YouTube Cryptshow TV, tuvo lugar la presentación del libro “Explosión Anime: Las películas del boom del anime en occidente”, del autor Felipe Múgica. Y en el canal El Kwoon de media tarde se habló de las recientes novedades cinematográficas de origen chino.
Foto de Anna G @soclalight
El segundo fin de semana comenzó con otro de los platos fuertes de Cryptshow. De nuevo, la proyección de un clásico del cine mudo con acompañamiento musical. De nuevo, Agustí Busom y COURE creando una ambientación brutal mediante instrumentos de percusión, viento y electrónicos. Y en esta ocasión, “La Passion de Jeanne d'Arc” de Dreyer fue la obra maestra que se pudo disfrutar en la sala del Círcol. Un servidor se permite remarcar que, en comparación con otros festivales medianos y grandes, Cryptshow no tiene nada que envidiar al programar algo así en cada edición.
Ese mismo fin de semana hubo más acontecimientos en línea. En el canal de YouTube Freakyonline, se llevó a cabo un tributo a Richard Corben mediante una charla con José Villarrubia. También se pudieron ver todos los cortometrajes a competición en la plataforma Festhome TV. Una selección de los once mejores cortos se proyectó en el Círcol a lo largo de dos sesiones.
La también ya clásica Nit Asiàtica trajo un dos por uno. Las dos entregas “The Outlaw Thunder” de Yue Song, de sesenta minutos de duración cada una, han sido combinadas por la distribuidora Trash-O-Rama. De este modo nace “Dragon Fury Road”, una película que llega a las dos horas sin cortarse en copiar a “Mad Max” y añadirle un sinfín de malas actuaciones y combates de artes marciales. En nuestra opinión, si este tipo de películas no se tomasen tan en serio a sí mismas, ganarían bastante más la simpatía del público.
Para terminar, en el club de playa La Donzella se anunció el palmarés completo además de proyectar varios cortometrajes de la edición de 2020. El XV Premio Sierra Circular se lo llevó “Dar-Dar” de Paul Urkijo. Un relato de terror del folclore vasco, sin diálogo alguno y con una fotografía y mezcla de sonido sobrecogedoras. Las obras “Habitat”, de Jaime Calachi, y “Survivers”, dirigida por Carlos Gómez-Trigo, también fueron premiadas.
Quince años lleva Cryptshow manteniéndose como un pequeño festival lleno de variedad y sorpresas, apostando por lo diferente y mirando al futuro sin olvidar el pasado del fantástico, el terror y la ciencia-ficción. Esperamos que, como mínimo, pueda mantenerse otros quince más mientras no haya ninguna invasión de criaturas de la quinta dimensión que lo impida. O mientras el panorama político y social de esta nuestra nación no olvide por completo la relevancia del arte y del fantástico.
Por Iban Granero del Río
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