Crónica del Cryptshow Festival 2014

La octava edición del Cryptshow Festival tuvo lugar durante la semana pasada. Con Lovecraft como leitmotiv principal y Colin Arthur como invitado estrella, el festival ofreció, de nuevo, un gran abanico de producciones internacionales entre las cuales hubo terror, fantasía, ciencia ficción e incluso humor. La literatura volvió a estar presente además de la pintura y, como novedad, se añadió el rol de mesa.

 

DÍA 1 – APERTURA Y EL CINE MUTANTE

 

Para preparar al público asistente de cara a todos los contenidos del festival, la película que abrió el festival fue Necronomicon (Christophe Gans, Shûsuke Kaneko, Brian Yuzna; 1993). Compuesta por historias dentro de un hilo principal, cada una dirigida por un responsable diferente, la cinta adapta tres relatos de H.P. Lovecraft.  Casi al mismo tiempo se pudo asistir a la mesa redonda Transmedia, crossmedia y multiplataforma: El cine mutante. Organizada junto con Judex Fanzine y con la asistencia de Marc Carreté, Pau Teixidor y Carlos Alberto Scolari, se habló de la nueva manera de explicar una misma historia mediante películas, series, novelas, cómics, videojuegos e incluso redes sociales.

 

Tras ello, empezó la proyección de cortometrajes a competición. Durante la primera tanda se pudieron apreciar Timothy, sobre la enemistad de un niño y su hermana mayor respecto a un ídolo del primero; Schwarzatmen, sin diálogos y ambientado en un futuro donde se habita en cúpulas debido al calentamiento global; Eat, una dura metáfora sobre la presión sometida a una modelo para estar lo más delgada posible; Lluvia en los ojos, animación stop-motion para narrar un adorable y trágico cuento sobre una niña y su mascota; Line up, cortometraje con paradojas temporales realizado para anunciar los artistas del pasado Primavera Sound; Cólera, plano secuencia sobre la ignorancia rural durante el brote de dicha enfermedad en los años setenta; y La boca del león; secuencia de posesiones demoníacas filmada con un teléfono móvil para Phonetastic de Sitges. Además, fuera de competición, se proyectó un clip de Estar guarros, web serie de animación stop motion totalmente independiente con guiños a la ciencia ficción, y A guerra dos gibis, falso documental brasileño sobre un dibujante de cómics y su peculiar carrera.

 

La segunda serie de cortos contuvo Trajectoires, un torture porn francés bastante suave y sin ningún mensaje; Canis, stop motion en blanco y negro con ladridos como único sonido y un niño aislado como protagonista, que obtuvo una Mención especial del Jurado a la Mejor animación; Buumes, pieza bastante cómica sobre unos vecinos extravagantes pero sin un ápice de terror o fantasía; Flesh computer, interesante propuesta sobre la conciencia humana y la robótica, con destacable efectos especiales pero con una reflexión pobre sobre el tema; Herrmann, sobre la violación sexual y una venganza terrorista por parte de la mujer; Happy birthday Mr. Zombie, un chiste largo sobre el cumpleaños sorpresa de un zombie y sus problemas para soplar la vela; y Wild bichons, animación mediante imagen real que apenas contó nada.

 

DÍA 2 – ROL, CINE Y HUMOR


Continuando la temática del festival, por la mañana se pudo jugar, gratuitamente, una partida del clásico juego de rol La llamada de Cthulhu. La película del día fue Los inocentes (Varios directores, 2013), slasher adolescente que, pese a estar dirigido por doce directores, ello no es ninguna cualidad al no aportar ninguno de éstos algo que diferencie su secuencia de la de los demás.

 

Acto seguido, dentro de la tercera serie de cortos se pudieron ver Alexia; Nuit noire; MIENIN; Rotkäppchen, con una peligrosa niña acogida como antagonista; Bite horse; Tras de ti, pieza bastante artística filmada en blanco y negro, con planos muy diferentes a lo habitual y con la sombra del protagonista como tema; y Un toit pour mes vieux os. El cuarto bloque contuvo Meeting with Sarah Jessica, en el cual el sueño de una fan tiene una sorpresa inesperada; IOA, stop motion con las vocales de una máquina parlante como protagonistas; The crononaut, ciencia ficción acerca de los cambios globales necesarios para la Tierra; Lilith, que ganó el premio Mejor actriz; Therion, ambientado en la posguerra española y con un niño especial como centro argumental; Gente cerca, sobre las redes sociales de contactos; y Dring of the dead; simple anécdota con un hombre protegiéndose de un zombie en una cabina telefónica. Y del mismo modo que el año anterior el comediante Jordi Merca aportó humor al festival con su monólogo Mamá, quiero ser un zombie.

 

DÍA 3 – V/H/S/2 Y FANTOSFREAK CONTRA FASCURT

 

Si bien los dos primeros días contuvieron una variedad entretenida, a partir del viernes el festival empezó a animarse todavía más, siendo este el día en que más cortometrajes se pudieron ver durante mañana, tarde y noche. Por la mañana tuvo lugar la sesión infantil EDUVIC, donde las obras proyectadas estaban más adecuadas para todas las edades en lugar de hacia un público joven-adulto. The Heebie-Jeebies; Kali o pequeño vampiro; Gosthly; Kylan; Recently in the woods; Blue and Malone; Mirage y DJ death fails entretuvieron a jóvenes (y no tan jóvenes).

 

Antes de la sexta tanda de cortometrajes se pudo disfrutar de V/H/S/2 (Varios directores, 2013) , otra cinta compuesta por segmentos pero en esta ocasión compartiendo la cualidad de estar rodados en el formato de metraje encontrado. El estilo cámara en mano se abandona para ubicar el objetivo en lugares inusuales y mostrar capítulos terroríficos a la par que cómicos, delirantes e incluso críticos al género.

 

Justo después empezó el sexto bloque de cortometrajes a competición con Skom, aventura infantil al estilo ochentero con monstruo incluido pero una historia demasiado simple; Moritz und der waldschart, bello relato de realismo mágico sobre la hermandad; Mocking death, sketch cómico sobre cómo engañar a la Muerte cuando ésta venga a por ti; Hogar, hogar, un previsible drama postapocalíptico demasiado alargado; La sed animal, sencilla y curiosa historia sobre invocaciones demoníacas; y The last ten, ejercicio de estilo que mediante un único plan cenital muestra lo que podría ser el final de una novela negra. Igual que el primer día, se proyectaron dos cortos fuera de competición: Te quiero demasiado, acerca de un adolescente que no ve límites para que su amada forme parte de él; y Tuck me in, adaptación de una escalofriante historia corta popular de las Two sentences stories.

 

El séptimo grupo de cortometrajes a competición contuvo The case of Mary Ford, un drama fantástico con un triángulo amoroso y el mar como tema principal; La bête; metáfora animada sobre una mujer y la bestia que decide poseerla, de carácter simple y con toques de erotismo; Krohm, adaptación libre de numerosas obras de Lovecraft que, pese a un correcto planteamiento, se desmorona de cara al final; La hierba del diablo, breve relato sobre dos niños y la criatura que esconden en un saco; y Sequence, notable obra que, aunque procura acercarse a los mejores episodios de The twilight zone pero se queda en el intento, fue la triunfadora del festival llevándose un total de seis premios: Premio Serra Circular Mejor cortometraje, Premio Serra Circular del público, Mejor director, Mejor guión, Mejor actor y Mejores efectos especiales.

 

Para terminar bien el día, por la noche tuvo lugar la tercera edición de la Batalla de programadores, pequeño gran festejo de acceso gratuito en el cual dos programadores de festivales (en esta ocasión Rafa Dengrà, de Fantosfreak, y Àlex Blasco, de Fascurt) lucharon proyectando cortometrajes que pasaron por sus respectivos festivales. Sin lugar a dudas, una manera excelente de cerrar el día.

 

DÍA 4 – CRIATURAS DEL FOLKLORE ASIÁTICO

 

Como el día anterior, el sábado estuvo lleno de actividades durante todo el día. Por la mañana tuvo lugar el ya habitual vermut literario, en el cual Javier Calvo, Lem Ryan, Noemí Risco y Alejo Cuervo. Entrada la tarde comenzó la tanda de proyecciones más larga del festival, con dos bloques de cortometrajes y dos largos entre estos. Zona de caza; Metamorphose, realizado para The ABCs of death 2; Attack of the killer bees; Mito, también filmado para The ABCs of death 2; y La otra cena, drama con zombies que puede sacar alguna lágrima.

 

The dead 2: India (Howard J. Ford y Jonathan Ford, 2013), cuya primera parte se pudo ver hace tres años en el festival, fue presentada por uno de sus co-directores, Howard. La cinta es una road movie con varios personajes pero centrada en uno principal, cuyo objetivo es reunirse con su amada. Pese al bajo presupuesto y la comicidad no intencionada de algunas escenas, la película entretuvo al público que, tras la proyección, pudo hacer a Howard numerosas preguntas. Entre sus respuestas, las más curiosas fueron las anécdotas acerca de rodar en África (primera entrega) e India (segunda), ya que constantes peligros pusieron en riesgo tanto las producciones como las vidas del equipo.

 

Los últimos cortos a competición proyectados fueron Ogre, retrato de un asesino aparentemente inocente; Voluntario, conversación cómica entre un guionista fracasado y sus padres; Sangre de unicornio, animación cruel y siniestra con estética adorable y ositos como protagonistas; Een verre reir, surrealista y sin diálogos, que se llevó el merecido premio a la Mejor banda sonora original; Mr. Dentonn, escalofriante terror infantil con influencias de John Carpenter; y MeTube,  indescriptible metraje que merece ser visto y que ganó el premio a los Mejores efectos visuales.

 

Tiktik: The aswang chronicles (Erik Matti, 2012) cerró la noche. La película, filmada en Filipinas pero completamente en estudio y con escenarios digitales, mostró como antagonistas a los aswang, monstruos vampiros populares por la zona. Pese a su estética cómica y sus exageradas escenas de acción, el conjunto de la cinta, sobre todo por su nudo, fue ligeramente tedioso.

 

DÍA 5 – COLIN ARTHUR Y CLAUSURA

 

El último día del festival comenzó de la mejor manera posible: con una master glass, gratuita y de dos horas de duración, de Colin Arthur, responsable del maquillaje o los efectos especiales de cintas tan míticas como 2001: A space odyssey (Stanley Kubrick, 1969), Clash of the Titans (Desmond David, 1981) o Conan the barbarian (John Milius, 1982).  Aunque más que una master class fue una exhibición de su trabajo, se pudo disfrutar de sus creaciones para The neverending story (Wolfgang Petersen, 1982), además de conocer la opinión del maestro respecto a algunos temas en particular. Por ejemplo, respecto al CGI sustituyendo a los efectos tradicionales, Colin argumentó que “desde hace siglos, en cada época los creativos han tenido diversos medios, pero a partir de la creación del cine el campo de los efectos se abrió por completo y no dejó de evolucionar”. También manifestó su opinión explicando que “los efectos realizados por ordenador no sustituirán nunca a los clásicos, ya que tiene menos poder que aquello que se puede tocar, pero aun así puede ayudar. Si ambos medios trabajan juntos pueden salir cosas muy buenas, pero sin experiencia ni ilusión nunca se obtendrán buenos resultados”.

 

Antes de la gala de clausura se proyectó Zarpazos! Un viaje por el spanish horror (Victor Matellano, 2014), un repaso al cine fantástico de los setenta y ochenta. La gala comenzó teniendo en cuenta al invitado del año: se proyectó The neverending story y ésta despertó el lado infantil-juvenil de muchos asistentes. A pesar que el film tenga sus defectos y algunos efectos visuales no hayan aguantado muy bien el paso del tiempo, la historia continúa siendo mágica en su planteamiento y emotiva durante su conclusión. Tras la proyección, Colin recibió el Premio honorífico.

 

Como en años anteriores, el dúo musical The Xuscos aportó humor a la gala presentada por el actor, director de teatro y animador Xavi Carreras. El jurado, compuesto por Marta Armengou, Quim Crusellas, Albert Monteys, Àlex Blasco y Samuel “Sam” Ortí entregó cada premio de manera entretenida y animada. Tras dicha entrega se proyectó el cortometraje ganador tanto del Premio Serra Circular Mejor cortometraje como del Premio Serra Circular del público: Sequence, que festival tras festival va acumulando premios y recibiendo buenas acogidas. Como detalle final, se mostró un avance de Pos eso (Sam, 2014), que creó expectativas de ver la película completa.

 

El Cryptshow Festival terminó dejando atrás más de sesenta cortometrajes internacionales, seleccionados de manera que hubiera una variedad bastante entretenida, además de todas las otras proyecciones y eventos variados. Manteniendo el nivel e incluso superándolo algunos días, el festival fue otra gran muestra de obras de terror, fantásticas y ciencia ficción. Sorprende que en algunas ocasiones la sala estuviera casi vacía, teniendo en cuenta la relación calidad-precio ofrecida y el público seguidor de estos géneros, aunque tampoco es totalmente incomprensible teniendo en cuenta los gustos y necesidades del espectador medio.

 



Por Iban Granero