Empezamos un nuevo día con “Maggie”, película de zombies con el gran atractivo de estar protagonizada por el mismísimo Arnold Schwarzenegger, en lo que se podría decir su papel más dramático hasta la fecha. El argumento es sencillo, el virus de los no muertos se ha propagado entre la población y como si de una enfermedad contagiosa se tratara, la sociedad aísla a los infectados. La historia se centra en cómo se enfrentan a esto padre e hija.
Tras estar bombardeados con este género en los últimos tiempos, el film no aporta nada que no se haya visto y de todas formas, no deja de ser un drama familiar con una peculiaridad fantástica.
Gaspar Noé aterriza en Sitges con un filme que ya se pudo ver en la pasada edición de Cannes. El reclamo:se trata de un filme con sexo explícito y real en 3d. El problema: sus casi dos horas y veinte de duración. La forma y el ritmo son más que correctos, el desarrollo es fluido y la cámara te lleva con amor de escena a escena. El guión, empero, peca de inocencia aunque contiene obviedades y algún que otro estereotipo del cual sacar sonrisas en los espectadores. En conjunto, un film algo simple pero con buen hacer.
“The invitation”, por contra, es una película redonda. La premisa es sencilla, una reunión de viejos amigos varios años después de que dos de ellos perdieran a su hijo. Ambos han rehecho sus vidas y la mujer organiza la “fiesta”.
La gran virtud del film es que crea, paso a paso, el ambiente perfecto para introducirte en esta extraña velada, va colocando peldaño tras peldaño para que puedas sentirte parte de este pequeño grupo y experimentar lo mismo que ellos. De una situación aparentemente superficial, pasando por momentos incómodos hasta dudar primero de la intención real de los anfitriones hasta de uno mismo, el film es capaz de dar varios giros para que seas partícipe de este puzzle de percepciones, superación del dolor y un gran final de fiesta digno del Festival en el que estamos.
El último proyecto de Mamoru Oshii “Nowhere girl” no deja indiferente. La representación más violenta de la psique de una chica a la que le hacen bulling en el instituto cobra vida en esta olla a presión que va acumulando su fuerza a cada minuto.
Con un desenlace digno de su realizador y una actriz a la altura de las circunstancias, la película es menos compleja que sus obras de animación, mas consigue sus propósitos. Es posible que los fans de “Ghost in the shell” se sientan decepcionados, pero nada más lejos de la realidad.
Por Silvia García Palacios
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