Son muchas las grandes muestras de cine de terror “indie” que nos llegan en los últimos años. Películas como “The Vvitch”, “It Follows”, “Get out” o la gamberra (y tristemente poco conocida) “Housebound” aparecen casi de la nada convenciendo a críticos que generalmente no se acercan al género y a una gran parte de público que se convierten en fieles defensores y en los mejores publicistas posibles.
Y en este contexto tenemos a “Llega de noche”, segundo largo de Trey Edward Shults que también se encarga de la escritura del guión.
"Llega de noche" no es tanto una película de miedo como una película sobre el miedo. El aislamiento, el constante peligro biológico y la muerte de un ser querido al comienzo de la cinta, van haciendo mella en el joven Travis (Kelvin Harrison Jr., “El nacimiento de una nación”. 2016), que sobrevive con sus padres (Joel Edgerton -”The Thing”. 2011- y Carmen Ejogo -”Selma”. 2014-) en una casa en el bosque, siempre alerta ante la amenaza de un virus letal y alejados del contacto de cualquier otro ser humano hasta que un joven desesperado por salvar a su familia irrumpe en sus vidas y pone en peligro la poca estabilidad que conseguían mantener.
Es un planteamiento sencillo y algo manido, pero que siempre puede funcionar. El caldo de cultivo perfecto para que la tensión y la paranoia convierta al mejor hombre en la peor bestia. Lo hemos visto infinidad de veces, pero es imposible hacer ascos cuando un actor como Edgerton tiene que colocarse en la línea entre el instinto de mantenerse a flote a toda costa y la solidaridad con otros necesitados.
Lo que pasa con "Llega de noche" es que, pese a esto, no parece saber en qué dirección quiere ir. La historia de la nueva familia parece más un episodio de la que debería ser una trama más grande. Y el punto de vista de Travis, que podría aportar un toque diferente, queda muy recortado por el hecho de que, en realidad, no es él el protagonista de la película. Trey Edward Shults incluso llega a abrir puertas hacia caminos -como el interés de Travis, un adolescente sin más contacto femenino que su madre, hacia su nueva y joven compañera de piso- que luego deja sin recorrer; quedando un argumento que se cocina a fuego lento para estallar de forma demasiado súbita, como si le entrara prisa por acabar la película y no supiera cómo. Una verdadera pena en una cinta que está dirigida con mano firme por un director que sabe manejar la tensión y a un reparto que se mantiene creíble y comprometido durante todo el metraje.
Con todo, "Llega de noche" es una propuesta interesante, aunque sufra de cierta falta de enfoque. Una cinta oscura y claustrofóbica en plena temporada de hits veraniegos, que encontrará sus fans entre los seguidores del terror más personal y también un buen número de detractores entre los consumidores de “Saws” y similares, siempre dispuestos a cargar contra cualquier cosa que no les ofrezca más y más de lo mismo. Una apuesta diferente para los fans de lo que vienen a llamar “terror de autor” y para cualquiera que no le haga ascos a pasar un buen mal rato.