El espejo siempre tiene dos caras
La cara oculta (2011, Andrés Baiz)
El monstruo de ojos verdes puede afectar de muchas formas con consecuencias no siempre muy agradables. En "La cara oculta" se nos plantea un original escenario.
Contextualizada en Colombia, el pais natal de su director, el film narra la "prueba" de fidelidad que ejecuta Belén, la novia de un prometedor director de orquestra ante la sospecha de un affaire de éste. Lo más interesante del film es la forma en la que está narrada esta historia dividiendo el film en dos partes bien diferenciadas, la primera en la que la repentina desaparición de Belén hace sospechar de su novio, ya que en cuestión de días ha encontrado una nueva pareja; y una segunda parte en la que descubrimos qué le ocurrió a la protagonista. Desvelar más del argumento es quitar al espectador el mayor incentivo para comprar una butaca.
Así pues, con dos películas en una: thriller y terror psicológico el director aborda las pasiones al límite de sus protagonistas, centrándose especialmente en los personajes femeninos, los cuales, esperemos, no sean representativos de su género. El protagonista masculino, pues, se convierte en el objeto deseado y su papel carece de profundidad alguna. Y es precisamente la profundidad la caracteristica que brilla por su ausencia en la película, llevando a la conclusion inevitable de que se queda de algun modo a medias. Se le podía haber sacado mucho más partido tanto al suspense de la primera mitad como al drama humano que se plantea en la segunda.
La cara oculta es el segundo largometraje de Andrés Baiz, un director claramente interesado en explorar los límites de las pasiones humanas (Vease el film Satanás, 2007) y claramente en el buen camino para crear una obra de arte si su olfato por este tipo de guiones se mantiene y se atreve por llevar más allá a sus personajes para así llegar a emocionar verdaderamente al espectador.
Por Silvia García Palacios
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