Crónica de Sitges 2011

          La edición del festival internacional de cine fantástico de Sitges de este año ha saciado con creces. Con una propuesta cinematográfica repleta de posibilidades, los resultados no han podido ser más satisfactorios.


            La inteligente elección tanto de la inauguración con la atrevida y consistente “Eva” (galardonada con el premio a mejores efectos especiales) así como la precuela de una película de la talla de “The thing” como clausura, han sido respectivamente un buen punto de partida y una excelente despedida.

                            

El director Kike Maíllo demuestra ser un buen conocedor del cine fantástico con su opera prima “Eva”, una historia futurista llena de conflictos morales en la que han participado actores tan importantes como Daniel Brühl o Lluis Homar dentro de un circo de efectos especiales a la altura de las más notables producciones de Hollywood.